El radicalismo como forma de hacer política

Un yerno mío británico se asombraba, no hace mucho, de que los españoles gritásemos tanto en la calle, sin dejarnos hablar unos a otros ni en las reuniones familiares y, en cambio, nuestros parlamentarios fuesen tan corteses, turnándose en el uso de la palabra y no interrumpiéndose: “Justo lo contrario de lo que sucede en…